Cuando compramos un producto, enviamos una especie de señal al mercado. Le decimos: sí, esto queremos o necesitamos, este producto, este servicio, puede ser una tendencia. Como consumidores podemos comprar aquello una o unas cuantas veces, pero cuando una empresa compra, lo hace en grandes cantidades y, por ende, sus señales al mercado son aún más significativas. Por ello, cuando una empresa decide con qué servicios y productos contará en sus cadenas de suministro, su responsabilidad es inmensa: pueden jugar un papel crucial en las nuevas tendencias de la ofertas y demandas de una sociedad. 

“Las cadenas de suministro son esenciales para el éxito de casi todas las empresas y pueden ser una fuente importante de creación de valor e innovación”, señala la organización internacional Principles for Responsible Investment (PRI). Sin embargo, en la actualidad, son estas áreas de las empresas las que, en muchos casos, generan los impactos más significativos: hasta el 80% de la emisiones de gases de efecto invernadero y más del 90% del impacto en recursos naturales. 

También según estudios de PRI, en sectores como la generación de energía eléctrica, por ejemplo, los mayores impactos se desprenden de la misma actividad que desarrollan, pero en los servicios financieros, los alimentos y bebidas, el 98% de los impactos ambientales se encuentran en la cadena de suministros, es decir, en los servicios y productos que contratan y que no están directamente bajo su control. En el sector de las telecomunicaciones, retail y automóviles, esa cadena también es producto del 96% de las consecuencias ambientales, sociales y económicas. 

Ante este escenario, hay una nueva tendencia que está germinando en las empresas. “Las compras sostenibles es el acto de adaptar los factores sociales, económicos y ambientales junto con las consideraciones típicas de precio y calidad en el manejo de las organizaciones de los procesos y procedimientos de compras”, ha explicado Lisa Bunclark, directora de programas internacionales y profesora de Centrum PUCP, en el taller El círculo virtuoso de las compras sostenibles. “A medida que las cadenas de suministro quedan fuera de las operaciones principales de una empresa, las exponen a riesgos ocultos e incontrolables”. 

La responsabilidad, en este caso, no es solo con el medioambiente, explicó Bunclark. El impacto social puede ser trágico: en un mercado tan globalizado como el actual las empresas están propensas a contratar, sin saberlo, servicios que transgreden las leyes nacionales o internacionales con prácticas poco éticas que atentan incluso contra los Derechos Humanos, lo que puede terminar creando problemas monetarios, legales y reputacionales para las empresas que hacen uso de estos servicios. 

Por ello, las organizaciones Perú 2021, Centrum PUCP y GRI han impulsado la Red de Compradores Responsables. “Cuando nos unimos estas organizaciones nos trazamos un objetivo claro: reconocer el poder de la compra para promover un desarrollo sostenible y nuevamente cae todo en qué señales estamos dando al mercado con cada una de nuestras compras”, explicó el director de la oficina de Gri en Perú, Daniel Vargas. . 

Con ese objetivo, están ayudando a las empresas a reducir los riesgos en su cadena de suministro, generar indicadores de gestión asociados a sostenibilidad antes, durante, y después del proceso de compras, y dando acceso a proveedores que además de ser competitivos, cumplan con los estándares esperados de sostenibilidad.

El contexto es propicio. Como indicó el estudio Proyecciones para una reactivación empresarial sostenible en 2021: 70,8% de las empresas en la región declaran haber dado una prioridad alta a la sostenibilidad después de la crisis sanitaria del 2020. Y en Perú, está sucediendo lo mismo con el 76% de la empresas. 

“No es algo que solo va a ayudar al medioambiente y a la sociedad, sino también a la empresa en sí misma”, aclara Bunclark. “Trabajar con compras sostenibles, brindar servicios y productos sostenibles ayuda a desarrollar y mantener una reputación positiva como una empresa que cuida a la sociedad y al medioambiente. Es algo que los clientes buscan”.