Cada vez son más las mujeres que se atreven a emprender un negocio. De acuerdo con el estudio Perfil del Emprendedor Peruano del Bicentenario, realizado por Ipsos, el 60% de los líderes que dirigen micro y pequeñas empresas son mujeres. Sin embargo, el desafío de cerrar las brechas de género todavía es grande, especialmente en campos como la inclusión financiera y el empoderamiento económico. 

Si bien el Estado trabaja para derribar estas barreras, también hay empresas privadas que, desde sus sectores, se ponen el overol para contribuir con la causa. Es el caso de Mibanco, entidad financiera que hace más de cinco años puso a disposición de las mujeres emprendedoras su producto Crédito Mujer, con el objetivo de ayudar a las mujeres emprendedoras a que alcancen su independencia y empoderamiento económico. 

Javier Ichazo, gerente general del banco especializado en microfinanzas, destaca que este producto financiero, enfocado en negocios emergentes, rompe paradigmas y ofrece las mejores condiciones del sector, pues el trámite para acceder al crédito es más sencillo, con menos requisitos y documentos requeridos, y se otorga con una evaluación simple, que solo toma en cuenta el nivel de ingresos de la solicitante, pero no el del cónyuge. “De esa forma, respaldamos que una mujer que aporta ingresos complementarios a su hogar no quede fuera del sistema financiero”, afirma el ejecutivo. 

PROPUESTA PIONERA
Ichazo cuenta que una de las razones que motivó la creación de este producto es que las mujeres casadas o convivientes con niveles de ingresos muy bajos no eran consideradas sujeto de crédito. La evaluación de un crédito por las entidades financieras tomaba siempre en cuenta la unidad familiar en su conjunto y solo al mayor ingreso, que tradicionalmente era el del hombre. De esta forma, no se prestaba atención a si las mujeres tenían sus propios ingresos, como resultado de sus pequeños emprendimientos.

Con Crédito Mujer ese paradigma se derrumba y se crea un escenario propicio para el crecimiento personal de ellas. “Queremos acercar el crédito a las mujeres que se dedican a una pequeña actividad comercial, como una llave para salir del círculo de la pobreza o de la dependencia económica y emocional de sus parejas”, refiere el gerente general de Mibanco.  

Se trata, por lo tanto, de una propuesta pionera dentro de la industria de microfinanzas que ha provocado una respuesta del mercado: el reconocimiento e inclusión de la mujer. Además, ha servido de inspiración para que otras entidades financieras implementen sus propios productos crediticios dirigidos a este público.

NIVELAR LA CANCHA
Desde su lanzamiento (2017) hasta diciembre del 2021, el Crédito Mujer registró más de 165 mil colocaciones, por un monto que superó los 227.8 millones de soles. Durante ese período, Mibanco atendió a más de 140 mil mujeres, de las cuales 44 mil accedieron con este producto a su primer crédito.

La novedad este año es que durante el primer trimestre se lanzó una nueva versión del crédito. Las mejoras incorporadas incluyen la ampliación del perfil de cliente a mujeres cuyos ingresos son los principales dentro de su hogar, sin importar si son casadas, convivientes o solteras. 

“Es el producto bandera dentro de nuestra estrategia de sostenibilidad. Con él buscamos generar oportunidades para cada vez más mujeres de nuestro país. Ofrecemos una solución que representa una liberación para las mujeres, buscando que muchos emprendimientos de ellas vean la luz y no queden en el olvido”, destaca Ichazo. Su intención de nivelar la cancha a través del Crédito Mujer encaja con los planteamientos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, especialmente con el ODS 5 (Igualdad de género), el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico) y el ODS 10 (Reducción de las desigualdades).