¿Quién no se ha quedado sorprendido, este último mes, al ver que sus productos de consumo habitual tienen uno o dos octógonos negros? Desde el 17 de junio de 2019, todos los alimentos industrializados, cuya composición supere los límites de azúcar, sodio o grasas saturadas, están obligados a llevar un octógono de advertencia. El objetivo, según explica la Dra. MSc. Faviola Jiménez Ramos, directora de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Científica del Sur, “es lograr el autocuidado de la salud de las personas para que paulatinamente se aprenda a leer la etiqueta nutricional completa, y puedan realizar una compra consciente y saludable”.

Este proceso, como apunta la Dra. Jiménez, es el comienzo e irá perfeccionándose, pues tiene los buenos augurios de los resultados de Chile, país que ya hace más de tres años adoptó esta medida.

Mantener una buena alimentación y tener un estilo de vida saludable, está relacionado también con crear entornos saludables. “Podemos tener la decisión de comer sano, consumir frutas o pescado, pero si no tenemos la disponibilidad del producto, o el acceso, porque es muy caro, entonces no se hace constante la alimentación saludable”, explica Jiménez.

Por ello, uno de los eventos referentes de la carrera de Nutrición es la ‘Feria Científica Saludable’ que muestra un modelo vivo de una ciudad con entornos saludables. Este esfuerzo lo realiza la Científica en su propio campus al contar con bebederos de agua pura, con lo cual evita que los estudiantes compren gaseosas o productos envasados; un biohuerto, cuyos alimentos son adquiridos por los mismos universitarios y máquinas expendedoras saludables que ofrecen frutas deshidratadas, galletas con fibra, hojuelas de maíz, entre otros productos libres de octógonos.

LA IMPORTANCIA DE EDUCAR E INFORMAR
En una realidad como la peruana, donde las enfermedades relacionadas con la alimentación varían desde la desnutrición crónica, que en el 2018 afectó al 12,2 % de la población menor de cinco años; hasta el sobrepeso u obesidad, que afectó a uno de cada diez niños, según cifras del INEI, los retos de los nutricionistas se han ampliado.

En ese contexto, la Científica busca formar nutricionistas líderes en promoción de la salud y bienestar; pero, además, que los mensajes de orientación lleguen de la manera clara.

La universidad se preocupa por desarrollar una competencia de comunicación efectiva en todos los cursos relacionados a Nutrición y Dietética. Por ello, entre las actividades de formación que tienen sus estudiantes destacan diversas campañas de promoción de alimentación saludable, como la más reciente de octógonos, donde los universitarios lideraron una campaña informativa digital en la que enseñaron a la población el significado de cada octógono nutricional.

“La gente no entiende de aminoácidos, de términos muy bioquímicos, sino de comida, por ello hay que hablar en términos que comprendan”, señala Jiménez. Bajo esa consigna se desarrolló el espacio ‘Decisiones saludables’, que es un repositorio de diversos materiales de difusión dirigido a la comunidad. Este incluye guías, tips, entre otros, que son difundidos en diferentes parques y mediante las redes sociales de la universidad.

PROGRAMAS QUE CONECTAN CON LA COMUNIDAD
A las acciones de educación de la Científica, se suma el programa ‘Nutricientífica’, que la universidad trabaja en los colegios a través de talleres; la campaña de ‘Consultorio Nutricional Itinerante’, que permite la instalación y atención nutricional para los vecinos de 6 distritos de Lima (San Isidro, Miraflores, La Molina, San Miguel, Villa El Salvador y Barranco) y el Congreso ‘Alimentos y Salud’ (Congreso Food and Health – F&H), que realizará su sexta edición, en noviembre próximo, con el tema de “Agricultura familiar y nutrición”.

Estos esfuerzos de la carrera de Nutrición y Dietética, y de las carreras de ciencias en general de la Científica, fueron reconocidos por el Ranking de Impacto Universitario del Times Higher Education THE, que colocó a esta casa de estudios, este año, en el top 2 de las universidades peruanas. Este ranking es una herramienta de medición global de impacto social y económico de las instituciones de educación superior, basado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. 

Las actividades de la Científica, contribuyeron al cumplimiento de la ODS 3: Buena Salud y Bienestar; ODS4: Educación de Calidad; ODS 12: Producción y Consumo Responsables y ODS 17: Alianzas para lograr Objetivos.

Adicional a ello, el proyecto de universidad saludable ‘Científica Saludable’ que trabaja cuatro ejes de acción: alimentación saludable, actividad física, salud mental y espacios libres de humo de tabaco, ha permitido que la Universidad Científica del Sur haya sido incluida, desde el 2014, en la Red de Universidades Saludables de Lima adscrita al Ministerio de Salud.

De esta manera, se evidencia que las universidades, a través de la formación de profesionales, pueden enseñar a todos los peruanos a tener una alimentación sana y, con ello, fomentar una sociedad más saludable, ya que como afirma la Científica, si “mejoras tú, mejora el mundo”. 

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