5 características de las operaciones mineras sostenibles

La crisis sanitaria global representa una oportunidad para promover una industria extractiva responsable y amigable con el medioambiente.

Redacción ContentLab

En su sentido más empresarial, el concepto de sostenibilidad se enfoca en todas las acciones que ejecuta una empresa para garantizar una visión equilibrada y razonable de la actividad económica, dentro de un contexto social y de respeto al medioambiente. En el marco de la actividad minera, la gran envergadura de los proyectos exige altos estándares de calidad y protocolos ambientales para garantizar que las operaciones no contaminen y al mismo tiempo contribuyan con el desarrollo de las comunidades aledañas.

Al respecto, Mark Robinson, director ejecutivo de la organización Iniciativa de Transparencia en la Industria Extractiva (EITI, por sus siglas en inglés), advierte que, en el contexto que hoy vivimos, los paquetes de recuperación y los estímulos de los gobiernos deben promover nuevas tecnologías y favorecer una transición hacia economías bajas en carbono.

“Se necesitan normas de transparencia más estrictas y cooperación internacional para garantizar que la adquisición de minerales críticos para la transición energética también contribuya al desarrollo sostenible de los países ricos en recursos”, explica Robinson en el artículo “Three ways extractives transparency can help countries tackle the triple crisis”.

“Las alianzas con diversos ‘stakeholders’ podrían configurar nuevos escenarios en los que la minería refuerce su papel como un actor clave para el desarrollo de los pueblos en las zonas de influencia y la preservación del medioambiente”

Las palabras de Robinson son una demanda urgente, si consideramos que, según EITI —organización a la que pertenecen 53 países productores, entre los que figura el Perú—, el coronavirus afectó más a los países ricos en minerales, ya que, paradójicamente, poseen los sistemas de salud más débiles.

Bajo ese enfoque, desde el año 2008, con la creación del Ministerio de Ambiente, existe un control cada vez más estricto de la actividad minera, labor que recae en el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA). Precisamente, el objetivo de la OEFA es fiscalizar la forma en la que operan las compañías mineras, con miras a que su impacto en las zonas de influencia sea más positivo.

El rol de la OEFA contempla:

– Velar por la sostenibilidad, privilegiando las zonas críticas de alta conflictividad socioambiental, los ecosistemas frágiles y la vulnerabilidad de las zonas productivas.

– Emplear tecnologías de información para contribuir con el enfoque de riesgo y permitir la coordinación e intercambio de información.

– Desarrollar de manera integral, estratégica, sostenible y articulada la labor de fiscalización ambiental, en beneficio de las zonas de influencia y el país en general.

– Incrementar la innovación tecnológica en los procesos de fiscalización.

MINERÍA POST COVID-19
Una operación sostenible es también aquella capaz de preservar un impacto positivo en el tiempo. El reporte “COVID-19 y minería: a sesenta días de la declaratoria de Estado de Emergencia”, desarrollado por el Centro de Estudios sobre Minería y Sostenibilidad de la Universidad del Pacífico, refiere que la sostenibilidad ambiental y social seguirá siendo importante durante y después de la pandemia.

El informe señala que, en un contexto en el que la pandemia afectará la percepción social y las expectativas de las comunidades, el reto será generar vínculos más sólidos con dichas comunidades.

Precisamente, las alianzas con diversos ‘stakeholders’ podrían configurar nuevos escenarios en los que la minería refuerce su papel como un actor clave para el desarrollo de los pueblos en las zonas de influencia y la preservación del medioambiente. Según el documento “Cartografía de la minería en relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, del Centro de Inversión Sostenible de la Universidad de Columbia, se debe intensificar el diálogo entre sectores industriales, gobiernos, sociedad civil y comunidades locales.

CARACTERÍSTICAS DE LA MINERÍA SOSTENIBLE
Para Ricardo Cayo, docente del Programa de Alta Especialización en Gestión Integral para la Minería Moderna de ESAN, son cinco las principales características que definen una operación minera sostenible:

1. El uso de la tecnología

Los equipos y tecnologías de última generación elevan los estándares de cuidado del medioambiente.

2. Comunicación con las comunidades

Es necesario establecer espacios de diálogo con los diversos ‘stakeholders’, para saber qué problemas atender o prever.

3. Puentes entre el Estado, la empresa extractiva y las comunidades

Los conflictos pueden evitarse si se crean mecanismos de coordinación entre estos tres agentes.

4. Estudios que generen confianza

Se deben desarrollar estudios de impacto ambiental, tanto en la exploración y la explotación como en la clausura de la mina.

5. El ahorro de agua

Esto se debe lograr mediante las prácticas sustentables de uso de recursos renovables, siembra de agua, desalinización y reutilización del recurso hídrico.