¿Cómo desarrolla la minería su camino hacia la sostenibilidad?

Ejemplos hay de todos los colores y sabores. Se puede citar el caso de la minera Toromocho, que, debido a las restricciones por seguridad y medidas como el aislamiento social, implementó la solución WeComm de Huawei como parte de las herramientas para el trabajo remoto de sus colaboradores. Se trata de un servicio de comunicación al instante llamado PTT (‘push to talk’), que permite a la empresa continuar sus coordinaciones sin la necesidad de una infraestructura de telecomunicaciones. 

Al respecto, Luis Ticona, gerente de Mina de Toromocho, reafirmó en un comunicado de prensa que la COVID-19 aceleró las transformaciones que ya se tenían planificadas. Así, explicó, esta solución de despacho remoto les permitió ahorrar en costos de energía, alojamiento y transporte de personal.

La inversión en sostenibilidad en el sector minero es en realidad una tendencia mundial. Como explicó Morgan Rody, ingeniero especializado en robótica móvil y ex gerente senior del proyecto Sustainable Intelligent Mining Systems (SIMS) de la Unión Europea, en los próximos años veremos consolidarse una minería libre de CO2, digitalizada y autónoma.

La apuesta por la sostenibilidad es tan clara que, según el especialista, será posible hablar de “minería climática”. ¿A qué se refiere? Por ejemplo, a que esta actividad explota minerales como el litio, que ha permitido el desarrollo de una tecnología limpia y almacenadora de energía: la batería de iones de litio (Li-Ion). Según los expertos, sus posibilidades de uso son tantas que podría dejar de lado a los combustibles fósiles. Hoy en día ya se utiliza para los dispositivos móviles y los autos eléctricos. 

Para sentar las bases de la descarbonización, la consultora Deloitte aconseja su informe anual “Tracking the Trends 2020” adoptar un enfoque multifuncional. Es decir, la descarbonización no puede ser tratada como un complemento a la gestión de la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa. “Por el contrario, el concepto de descarbonización debe ser integrado en la toma de decisiones operacionales, estratégicas y financieras, y en el riesgo corporativo”, apunta el documento.

AUTOMATIZACIÓN Y EFICIENCIA
Oliver Langefeld, catedrático de la Universidad Técnica de Clausthal (Alemania), afirmó en una cita de “Jueves Minero” —organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP)— que la minería se encamina hacia el ‘Blue Mining’ (minería azul). Este concepto supone el equilibrio entre la sostenibilidad, el uso eficiente de energía y la ergonomía.

Algunas experiencias de automatización han comenzado a aparecer en el sector y nos dan una idea de lo que veremos pronto. Por ejemplo, en la mina más profunda del mundo —la mina Mponeng, de AngloGold Ashanti (Sudáfrica)—, se ha iniciado la perforación remota a través del equipo de perforación automatizada ‘master drilling’. De esta manera, el contratista en la superficie puede operar una máquina que se encuentra tres kilómetros bajo la tierra.

Así, la automatización y la digitalización son ya un camino decisivo en la minería, y no hay vuelta atrás. Como se ha señalado, muchos de estos avances han sido impulsados con especial interés en el último año, a raíz de la pandemia del COVID-19 y la necesidad de mantener al sector en funcionamiento. En ese sentido, Romulo Mucho considera que los grandes avances para evitar los contagios de coronavirus harán posible tener operaciones más eficientes que podrán hacer frente a la caída de los precios de los minerales, motivada por la misma pandemia.  “La minería siempre ha tenido que transitar por retos, incluso en la época de bonanza. Eso no va a cambiar”, asegura. 

Por lo tanto, de acuerdo a los expertos, lo avanzado en el 2020 es la muestra de cómo el sector irá cambiando y transformándose hacia una minería cada vez más sostenible.