Paso 1: ¿Cómo reconocer si nuestro hogar está preparado para un gran sismo?

¿Está nuestra casa preparada para enfrentar un terremoto? Las placas tectónicas frente a las costas del país vienen acumulando energía de deformaciones por más de 200 años. Este silencio sísmico, según datos del Instituto Geofísico del Perú, llevaría a los hogares peruanos a experimentar un sismo no menor de 8.8 grados y que afectaría a 9 millones de habitantes, de acuerdo con estimaciones del Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred).

En este escenario, la preparación familiar nos ayudará a evitar pérdidas mortales. Miguel Miyazaki, director de Preparación del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), señala que el primer paso para reducir los riesgos de este posible terremoto es identificar las capacidades de cada miembro de nuestra familia. “Hay que reconocer quiénes son los que tienen mayores capacidades: por ejemplo, para cargar o para ayudarnos a salir”, indica.

Con ello podremos reconocer las necesidades de cada miembro, a quiénes deberemos auxiliar y qué insumos deberán incorporarse en la mochila de emergencia. Luego, debemos analizar qué riesgos estructurales u objetos peligrosos nos rodean en casa. Cuadros, estantes o macetas colgantes pueden parecer inofensivos, pero durante un movimiento sísmico podrían ocasionar heridas de gravedad.

ADECUAR EL HOGAR
El arquitecto José Sato, miembro del Consejo Directivo del Centro de Estudios y Prevención de Desastres (Predes), señala que la vulnerabilidad de las edificaciones en Lima es alta debido a las autoconstrucciones y a la antigüedad de las viviendas. Por ello, recomienda identificar las áreas vulnerables junto a un experto y realizar los reforzamientos necesarios en nuestros departamentos o casas. 

En el caso de las autoconstrucciones, que según la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) representan el 70% de las viviendas, es necesario prestarles atención a las paredes edificadas con ladrillos ‘pandereta’. “Estos muros no soportarían el movimiento y, al perder estabilidad, se desmoronaría toda la edificación”, explica.

Asimismo, en el caso de viviendas en asentamientos humanos o junto a laderas, es necesario revisar dónde está asentada la casa y reforzar sus cimientos, además de instalar mallas electrosoldadas en las pendientes de estas laderas para reducir el impacto de posibles derrumbes.

Prepararnos y reconocer los riesgos en casa nos ayudarán a estar listos. Trabajemos en reforzarla para evitar consecuencias mortales. Para más información sobre cómo prepararte y los pasos a seguir para enfrentar un sismo, revisa cada semana el Especial #EstamosListos.