¿Cómo elegir un smartphone con gran capacidad multitarea? 

En los últimos años, hay palabras que se han vuelto parte de nuestro vocabulario habitual debido a la evolución tecnológica. Una de las más usadas es “multitarea”. La Real Academia Española la define como “un sistema informático que puede ejecutar varios programas o tareas de manera concurrente”. Esta es una capacidad que está presente en los smartphones de toda gama; sin embargo, solo los equipos más potentes pueden ejecutar múltiples aplicaciones exigentes a la vez, como videojuegos, streamings o edición de contenido multimedia. 

¿CÓMO SE EJECUTAN LAS APPS?
En los smartphones, la cualidad multitarea permite colocar las aplicaciones en un proceso llamado segundo plano, para que el usuario no pueda verlas. Las apps permanecen en este plano de tres modos: ejecutándose, en suspensión o cerrada. El modo en el que se encuentren dependerá en gran parte de la potencia del celular.

Ejecutándose. Mantener la app en funcionamiento tiene un impacto directo en la memoria, procesador y la batería del smartphone. Por ello, aplicaciones pesadas, como las de videojuegos, tienden a ralentizar los equipos que cuentan con menores recursos. Una de las apps más comunes que se mantiene en ejecución  en segundo plano son las de música, como Spotify.

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En suspensión. Suele ser el modo más común y mantiene la app “congelada”. Esta permanece en la memoria RAM del equipo para abrirla rápidamente cuando realices el multitarea o salto entre aplicaciones. Los videojuegos y redes sociales suelen entrar en este apartado. Si mantienes en este modo juegos como Fortnite o Genshin Impact en un smartphone con menos de  4GB de RAM, este comenzará a trabajar más lento. 

Cerrada. Cuando el smartphone no cuenta con mucha memoria RAM o tiene un procesador lento, entonces cierra la aplicación en segundo plano y vuelve a ejecutarla a pedido del usuario. 

EL EQUIPO IDEAL
Un smartphone potente no solo ejecuta varias aplicaciones a la vez, sino que puede realizar multiventana, una función que cumplen los equipos Android 7 en adelante. Esta permite dividir la pantalla para tener dos aplicaciones abiertas a la vez, como redes sociales, correos, entre otros. 

El poder ejecutar las aplicaciones de forma rápida depende también del procesador del móvil. Actualmente los procesadores más veloces y eficientes para Android son el Snapdragon 865 y 865+, además de Exynos 990. Estos suelen estar en equipos de gama alta y premium. Cuentan con funciones de inteligencia artificial que ayudan a optimizar la apertura de aplicaciones, cerrar apps que no se estén usando y maximizar la potencia en programas pesados, como videojuegos o streaming. 

Si trabajas desde el celular o te gustan los videojuegos, los mejores dispositivos para cumplir estas funciones son equipos como Samsung Galaxy S20 FE, que cuenta con 6 GB de RAM, y los de la familia Galaxy Note20, que tienen 8 GB de RAM. Ambos se  equiparan a muchas laptops en el mercado. 

La capacidad de almacenamiento es otro factor que debes tener en cuenta, puesto que las apps no se ejecutan bien si no hay espacio suficiente. Redes sociales como Facebook o juegos con gráficas exigentes suelen ocupar mucho almacenamiento. Por eso es recomendable un smartphone de 128 GB de almacenamiento y que tenga la capacidad de ampliar esta cifra a través de microSD.

Combinando una buena RAM, un procesador potente y un almacenamiento amplio puedes trabajar, estudiar y jugar con tu smartphone sin tener miedo a que las aplicaciones se cierren de repente.