REDACCIÓN CONTENTLAB
21 de junio, 2023

Durante su proceso progresivo de arranque, la Nueva Refinería Talara (NRT) superó sus márgenes de producción llegando a producir 2’970,958 barriles de diésel B5. Un hito al que ha llegado mientras se acerca a estar lista para operar al 100% de su capacidad. Con ello, Petroperú se posiciona en la región como un referente en la industria de refinación de petróleo.

El logro de esta meta “ha demandado la dedicación y el esfuerzo exclusivo de un equipo de ingenieros y técnicos peruanos. Los pasos claves han sido el entrenamiento disciplinado y exhaustivo del personal operativo y la pasión por nuestro trabajo”, señala en una entrevista el ingeniero Jhan Carlo Paiva López, jefe de Conversión de la NRT.

La reducción del azufre en los combustibles es importante para disminuir las emisiones vehiculares. Existen normativas que así lo exigen, debido a que al reducir la presencia de este elemento se mejora la calidad del aire en favor del ambiente y la salud humana. Actualmente, esto es posible gracias a la introducción de tecnologías avanzadas en el proceso de producción y refinamiento del combustible.

Una apuesta por la tecnología y el planeta

La NRT se destaca por su tecnología de última generación y altos estándares ambientales. Paiva López destaca las medidas implementadas para garantizar la eficiencia energética y reducir el impacto ambiental. “El proyecto en sí tiene como objetivo minimizar el impacto ambiental y mejorar la calidad del ambiente, esto mediante la producción de combustibles de bajo azufre. Para ello se han construido plantas de tratamiento que retiran el azufre de los combustibles, como gasolina, diésel y GLP, y convierten dicho azufre en ácido sulfúrico. Asimismo, los efluentes de la refinería son tratados utilizando alta tecnología de tratamiento terciario mediante bioreactores, lo cual permite cumplir los Límites Máximos Permisibles que exige la normativa peruana”, señala el ingeniero.

Además, según menciona el experto, la NRT utiliza diversas aplicaciones orientadas a la eficiencia energética, como hornos de alta eficiencia y cogeneración eléctrica con combustibles producidos en la misma refinería, lo que conlleva al uso eficiente de recursos energéticos.  

Por su parte, el ingeniero Carlos Llerena Vargas, jefe de Conversión Profunda de la NRT, resalta también la importancia de que Petroperú apueste por tener la más alta tecnología para cada uno de sus procesos. Esto sucede, por ejemplo, con la planta de Flexicoking, “la más compleja del nuevo esquema productivo de la NRT”, comenta en una entrevista.

Según señala Llerena, esta planta se pondrá en funcionamiento durante el segundo semestre de este año. Con su inclusión en el proceso productivo, permitirá “incrementar la rentabilidad del negocio al reducir la producción de residuales del 20 al 5% vol., para generar productos de mayor valor como las gasolinas, diésel y GLP”.  

Esto es posible, explica el ingeniero Llerena, debido a que en esta unidad “se procesan los residuales que vienen de la Unidad de Destilación al Vacío, que tienen bajo valor en el mercado, para convertirlos en productos de mayor valor”, como los ya mencionados.  

Además, esta unidad genera un gas denominado Flexigas que se produce transformando el coque, que es un subproducto sólido con apariencia similar al carbón. Este gas es el principal energético de la NRT, que “permitirá reducir el consumo del gas natural de 60% a menos del 10% de nuestro requerimiento energético. Cabe resaltar que, los combustibles gaseosos (Flexigas y gas de refinería) que se producen en esta planta son ecoamigables debido a su bajo contenido de contaminantes”, afirma el ingeniero.  

La producción de combustibles más limpios y de calidad es fundamental en el contexto actual de transición energética. En este sentido, la NRT contribuye significativamente a la diversificación de la matriz energética y al desarrollo sostenible del Perú. Por ello, los ingenieros Llerena y Paiva señalan que “con la NRT, nuestra soberanía energética está asegurada por los próximos 30 años, ya que la refinación es una industria clave que permite el desarrollo sostenido de otras industrias y comercios”. De esta manera, Petroperú se posiciona como un pilar estratégico para el futuro energético del país, impulsando la transición hacia fuentes más limpias y renovables, y asegurando un horizonte de prosperidad y desarrollo a largo plazo. 

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