Con esta acción, la presidenta de “Mujeres unidas” tenía la esperanza de que las autoridades, la prensa o cualquier empresa pueda ubicar alguna vez la pequeña estancia, que alimenta diariamente a cerca de 100 personas en el Barrio 6B de Alto Trujillo, un centro poblado en la capital de La Libertad.

Iniciativas como esta buscan combatir la inseguridad alimentaria que existe en nuestro país. De hecho, de acuerdo con un informe realizado este año por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), 6.8 millones de peruanos no se alimentan durante un día o incluso más.

Ahora bien, con determinación y mucha fe, Atanacia colocó los primeros peldaños para que su comunidad lograra subsistir a la emergencia alimentaria y lo hizo con los recursos de la ‘bodeguita’ que tenía en su hogar. “Como en toda tienda, tenía mis caseros que me pedían fiado. Luego comenzó la pandemia y empecé a guardar los productos para el consumo de mi familia, ya que no había dinero y no podía salir a comprar para vender. Tenía ‘arrocito’ y con eso preparamos un aguadito en la olla común. Fue nuestro primer plato”, recuerda Atanacia. 

Niños, madres y ancianos forman una larga cola —que puede llegar hasta una cuadra— desde muy temprano para ser los primeros en alcanzar un plato de comida. No es para menos, pues cuando surgió la iniciativa algunos no tenían la suerte de encontrar alimentos. Hoy, las lideresas ponen el máximo esfuerzo para que todos tengan un sustento. 

Haciéndole elogio a su nombre, en Alto Trujillo las mujeres son realmente unidas y muy organizadas. En un papelógrafo y con letras grandes hechas con plumón resaltan los grupos que se encargarán de cocinar durante la semana. Verónica y Ángela, Raquel y Liana, Sabina y Catalina, y así continúa la lista de grupos de dos que tendrá la meta de cocinar para las familias del 6B. 

Sí, a veces los quehaceres del hogar y el cuidado de los hijos no permiten cumplir la lista de manera religiosa, pero ellas se anticipan y encuentran la solución sin perjudicar a sus vecinos. “Si alguna no puede asistir, lo que gana la cocinera en el día se lo ofrece a otra persona. La mamá le da sus 10 soles y así la olla continúa funcionando”, señala.

Dos mujeres lideran la ollita común, junto con el apoyo y la atención de Atanacia. El cariño y la calidez con la que se refiere a su comunidad, da muestra de la valiosa relación que ha construido con ella a raíz de la iniciativa. “Los vecinos siempre me buscan y cuando no estoy se ponen tristes. ¿Dónde está la hermana Santana? Así me llaman y preguntan por mí”.

Siempre al frente

Un domingo, mientras Atanacia visitaba a su madre en la ciudad de Huamachuco, una llamada telefónica la llenó de alegría. Una representante de Ollas Que Desarrollan le acababa de comunicar que brindarían donaciones para la olla común, un apoyo que llegó precisamente en un momento de mucha carencia. 

“Vendíamos los menús aunque sea a S/ 2 para tener ingresos. Iba al mercado a que me regalaran papa o escogía los tomates, pepinos o zapallos más baratos, faltaba leña y usábamos botellas descartables. Hacíamos de todo para no cerrar.”, cuenta. 

Ollas que Desarrollan surtió la olla con sémola, fideos, atún, salsa de tomate, harina y mucho más. “Fue una emoción tan grande y lo llevo en mi corazón. Por eso, no puedo negar a nadie un plato de comida. Gracias a Ollas Que Desarrollan y a Juguete Pendiente”, comenta con felicidad.

Hoy, a pesar de las situaciones adversas, ellas continúan más unidas que antes. Lo mejor: buscan convertir a su olla común en un emprendimiento y saben que lo harán posible.

Súmate a Ollas que Desarrollan para alimentar un mañana mejor

Ollas que Desarrollan es un proyecto de Alicorp en colaboración con la ONG Juguete Pendiente que beneficiará a más de 270 ollas comunes en Lima, Piura, Lambayeque, La Libertad, Arequipa, Apurímac, Cusco, Cajamarca y Huancayo. Este proyecto está facilitando el acceso a alimentos y equipamiento, mientras brinda capacitaciones a sus lideresas en temas como gestión, nutrición o emprendimiento, con el objetivo de fortalecer estas organizaciones y ayudarlas a que sean sostenibles en el tiempo.

Únete a esta iniciativa en ollasquedesarrollan.pe.

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