Redacción: Katheryn Leonardo – ContentLab
Miércoles 15 de abril, 2019
P osiblemente, lo primero que surja en la mente de muchos peruanos al pensar en la carne de cerdo sea la imagen de una panceta a la caja china o una porción de chicharrón. Solemos creer que este alimento es una carne alta en grasas y la dejamos fuera de nuestro menú diario, sin saber la cantidad de beneficios que podemos estar perdiendo.
La carne de cerdo es un almacén esencial de vitaminas y minerales importantes para nuestro desarrollo, como el hierro, el zinc, el fósforo, el potasio y el magnesio. Destaca también por ser una de la carnes con mayor cantidad de vitaminas del complejo B, encargadas de acelerar el metabolismo de carbohidratos y ácidos grasos e intervenir en el fortalecimiento del sistema nervioso e inmunológico.
Una porción de 100 gramos de carne de cerdo contiene 21,4 gramos de proteínas
En una ración de 100 gramos, que tiene el tamaño de una palma, podemos conseguir 21,4 gramos de proteína de alta calidad, un tercio de nuestro requerimiento diario, según señala Milagros Agurto, nutricionista y asesora de la Asociación Peruana de Porcicultores (Asoporci). Como explica esta especialista, la carne de cerdo es una de las más magras que existe, pues el 70% de su grasa se almacena bajo su piel. “La grasa es visible y, al retirarla, nos quedamos solo con la parte magra”, destaca.
Una carne para todos
Esta característica la convierte en una de las mejores opciones para la dieta de deportistas, que buscan tener el peso ideal para mejorar su actividad física, y adultos mayores o personas con problemas cardíacos, que requieren consumir proteínas sin incrementar sus niveles de colesterol. Como demostró un estudio del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Chile (INTA), cortes magros como el lomo fino, la chuleta de lomo, el bife de lomo y la pierna sin piel son beneficiosos para mantener los músculos y contienen altas proporciones de vitamina B1, B2, B3, B6 y B12. Es así como una buena chuleta al vapor puede ayudar a cubrir las necesidades de este público.
Estos cortes magros son beneficiosos para todo tipo de persona, desde los deportistas hasta los adultos mayores, pasando por las embarazadas y los adolescentes. Se trata de cortes tiernos y suaves, por lo que Agurto indica que, en el caso de los niños, pueden incluirse como complemento nutritivo cuando empiezan su alimentación sólida, aproximadamente desde los seis meses. Este alimento les otorgará una buena cantidad de proteínas, grasas buenas (monoinsaturadas) y hierro, que ayudará con el desarrollo de sus huesos.
BIENVENIDA EN LA MESA Y EN LA COCINA
Si los beneficios que tiene esta carne sobre nuestra salud son abundantes, ¿por qué no cuenta con mayor presencia en las mesas peruanas? Quizás la respuesta esté en la desinformación que existe. A pesar de que el consumo de carne de cerdo se ha incrementado en los últimos años, según reportes de la Asociación Peruana de Porcicultores, todavía existe mucho desconocimiento sobre su versatilidad y sus tipos de cortes.
“El cerdo se puede aprovechar entero, desde la cabeza hasta la cola”, señala el chef Giacomo Bocchio, dueño del restaurante Porcus, quien además destaca su reducido costo frente a otras carnes y la variedad de platos que podemos cocinar con él. “Se pueden preparar guisos, saborizar las legumbres, cocinar chupes, hacer arroz con cerdo, milanesas, entre otros. Nosotros desmenuzamos la carne y preparamos incluso causa”, comenta.
5 beneficios DE CONSUMIR carne de cerdo
En este video, te contamos por qué la carne de cerdo es una fuente de nutrientes.
Existen cortes más allá de las tradicionales chuletas o panceta que podemos explorar y encontrar rendidores. Uno de ellos, como sugiere el chef, es el brazuelo: un corte magro, pero con una pequeña cantidad de grasa intramuscular que le da un toque justo de sabor. Incluirlo en la dieta diaria nos ayudará a variar nuestra fuente de proteínas y a adquirir un gran porcentaje de vitaminas del grupo B. Estos nutrientes son altamente recomendables para todos, incluso las mujeres embarazadas, pues contribuyen a la generación de glóbulos rojos y, en el feto, favorecen el crecimiento y el proceso de división celular.
Cortes como la patita de cerdo son muy valorados en la cocina de los restaurantes. Flavio Solórzano, chef de El Señorío de Sulco, señala que esta pieza del cerdo, además de aportar una gran cantidad de colágeno, es el secreto en el sabor de muchos guisos hechos por cocineros profesionales. “Somos una nación rica en gastronomía, pero no conocemos todo lo que tenemos. Y eso nos ocurre también con el cerdo”, comenta el chef.
CRIANZA CONFIABLE
Para aprovechar los beneficios de la carne de cerdo al máximo es necesario garantizar su calidad y salubridad. En nuestro país, esa labor está a cargo de la Asociación Peruana de Porcicultores, que agremia a 64 granjas tecnificadas que cumplen con los más estrictos controles de sanidad para producir una carne saludable e inocua.
“La calidad de nuestra producción tiene los mismos niveles de Estados Unidos y Europa”, señala Gustavo Robinson, vicepresidente de Asoporci. Las granjas tecnificadas, indica, son lugares especialmente diseñados para cumplir con los más altos estándares de una buena crianza porcina. Sus instalaciones, completamente estériles, cuentan con tecnología que les permite supervisar cada etapa de crecimiento del cerdo, monitorear su alimentación en base a granos de soya y maíz, y realizar un seguimiento veterinario a cada animal. Además, todas las granjas están registradas en el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA), del Ministerio de Agricultura y Riego (MINAGRI).
“Hay varios mitos del pasado sobre la crianza de cerdos, pero ninguno de ellos puede tener lugar en una granja tecnificada, donde todo está controlado minuciosamente”, agrega Robinson, quien destaca el esfuerzo de los agremiados de Asoporci por velar por la calidad del alimento producido. Como explica, mantener los estándares de una buena crianza es una labor rigurosa que va desde el momento de la gestación del animal –con técnicas avanzadas de genética– hasta la correcta comercialización de la carne producida.
Zona ASOPORCI
Estas exigentes medidas son la garantía para una carne de calidad que, desde el 2008 al 2018, aumentó su consumo en un 230%. Su aceptación se debe a que cada vez se deja más atrás la antigua relación que se tenía sobre el cerdo y sus condiciones de crianza precaria. “En el mercado, las personas pueden encontrar un puesto de garantía al ubicar el afiche de la Asociación Peruana de Porcicultores”, comenta Martín Torrejón, comerciante y criador de Agrocorporación San Diego.
Este certificado es un indicador de buena calidad y se le entrega a todos los comerciantes y carnicerías que reciben carne de cerdo de las granjas tecnificadas de Asoporci. Para reconocer un buen producto, Torrejón aconseja también prestarle atención al color y la textura de la carne en venta. “La grasa debe ser blanca y delgada, mientras que la carne tiene que tener un color rosado muy tierno. No debe ser ni roja ni morada”, especifica el comerciante.
La carne de cerdo es un alimento accesible y con una alta cantidad de proteínas. Además, su variedad de cortes le da una amplia versatilidad en la cocina, como podrás comprobar en las recetas que te presentamos a continuación. Anímate a hacer un lugar en tu mesa para esta carne y disfruta de sus beneficios.
#ComecerdoComesano
Pon a prueba estas recetas e incorpora una gran fuente de proteína en tu dieta diaria.
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